octubre 04, 2010

I've got soul but I'm not a soldier

Qué locura impertinente. Qué arrebato aberrante. Cómo quisiera descifrar el instante apriorístico a esos cambios que alteran completamente la forma en que solía advertir al mundo. Pero es irreal. Pisar fuerte. Correr a ciegas. Sonreír con los ojos. El dado fue cargado desde el principio, y ahora queda en el destino, aunque el tiempo se equivoque, yo he de aferrarme a los fantasmas que me dejarán colgando de alguna seguridad, o algún espejismo. Todo lo irreal y lo real se esfumará. Y allí en el pleno desierto, dejaré de existir. Porque no hay humano sin alma que no sepa que camino debe seguir para encontrarse.