abril 10, 2011

todo y nada


En un estado de completa neutralidad. Nada me interesa lo suficiente como para preocuparme, nada me importa lo suficiente como para pensarlo. Vacío, desintegridad, calma, paciencia, un poco de dolor más físico que sentimental, estrés y muchas ganas de viajar. Estoy motivada por ciertas cosas que nunca me motivaron, pero para todo lo demás es un completo estado de neutralidad y sobriedad. No sé describir cómo se siente, no se siquiera como explicar lo que ocurre por mi cabeza. Es simplemente la nada. Nada. Porque simplemente nada, es a la vez todo: dudas, incomprensión, incerteza, cansancio, pena, alegría. Arte.
El arte de sentir todo y nada a la vez, el arte de manifestar todo y nada a la vez, el arte de ser concreto, definido y preciso, o ser abstracto, inexacto e ideal. El arte de ser subjetivo y objetivo, de ser freno y acelerador. Es arte porque es algo. O nada, pero sigue siendo algo. Es arte porque florece, renace y brota de mi esencia. Es arte porque asi quiero definirlo: todos los sentimientos encontrados, y esta maldita neutralidad ante todo. Me falta algo, o me sobra todo. Indecisión, pesadumbre, cargas y monotonía. Una misma determinación frente a todo: LA NADA.

ESTOY COMPLETAMENTE CONFUNDIDA.