¿De dónde saco ahora las fuerzas si entendí que nunca te tuve ni nunca lo haré? Ese motivo por el cual luchaba día tras día se desvaneció... ahora nada tienen sentido, y me pierdo entre lágrimas y pensamientos. Pensar, si alguna vez te tuviera, proyectar esa imagen en mi cabeza. Dibujar la escena más hermosa del mundo junto a vos. Guardarla siempre en mi memoria, porque es ese recuerdo lo más cercano a tenerte. Sufriré unos días, tal vez meses, lloraré, añoraré días que jamás ocurrieron, pensaré en los pequeños momentos en que te vi sonreír a los lejos, que vi esos ojos brillar, junto a alguien más. Y cada vez que revise mi memoria allí estarás esperándome, estarás tal como estas ahora, sin ningún cambio. Porque quiero congelarte en este momento: quiero mirarte y tatuarte... no cambiaras jamás para mi. Siempre serás el mismo, siempre tendrás los mismos defectos y las mismas pequeñas cosas que me hacen quererte. Nunca crecerás, siempre tendrás el mismo rostro, los mismos ojos, siempre seras ese único que me hizo volar. Y con el tiempo creceré, pero como una fotografía vieja te transporta, así te tendré en mis recuerdos. Te dejaré ser. Serás la sombra, el suspiro, la mirada, los gestos, las palabras y el silencio de quien este conmigo. Serás el aire que respiro, serás mi fuerza. Serás mi sonrisa y mis lágrimas. Estas en mi. Por eso, te dejaré ser.
